Son trabajos que deben ser realizados por departamentos de ingeniería especializados.
Además de ajustar la instalación a la compleja y exigente normativa de protección contra incendios, se deben analizar los riesgos. Una vez analizados, se aplicarán aquellos elementos de prevención, alarma y extinción mas adecuados.
Por tanto, todo proyecto PCI, debe considerar las medidas pasivas, que son las propias de la edificación y de los elementos constructivos, o aquellas que físicamente impidan la propagación como las puertas cortafuegos). También deberá incluir las Medidas PCI activas, que son las destinadas a procurar la extinción del incendio.
Bifan cuenta con un departamento técnico cualificado, que realizará un análisis de las necesidades de la instalación y desarrollará un presupuesto informado y perfectamente justificado a las necesidades de la carga de fuego, realizando todos los cálculos y dotando de la capacidad al sistema de protección contra incendios.